INGREDIENTES:
– 600 gramos de patatas
– 200 gramos de col kale
– 250 gramos de costillas veganas Vegesan
– 3 dientes de ajo
– 25 gramos de almendras tostadas
– AOVE
– Sal
– Pimienta negra molida
ELABORACIÓN
Añadimos en un cazo con agua, pimienta y un poco de sal, las patatas peladas y lavadas, para elaborar el puré. Cuando estén cocidas, retirar del fuego, colarlas y reservar el agua de la cocción. Ahora, en el mismo cazo las batimos con la batidora y vertemos si es necesario un poco del agua reservada. Tened en cuenta que debe quedar un puré suave pero espeso, como si fuera un jarabe o una salsa reducida.
Seguimos con la col kale, quitamos los tallos, la picamos con el cuchillo y las lavamos en un bol con agua. Escurrimos y las escaldamos en un cazo con agua hirviendo de 2 a 4 minutos, para darle un toque rápido fuerte de cocción y fijar el verde. Pasado el tiempo las sumergimos en un bol con agua y hielo para cortar el hervor. Escurrimos y reservamos.
En una sartén grande sofreímos los ajos pelados y picados finamente con aceite de oliva (AOVE), cuando estén dorados agregamos la col kale y la dejamos cocinar unos minutos, después, agregamos el puré de patata y mezclamos bien. Rectificamos de sal si hiciera falta. Continuamos con la cocción de 5 a 10 minutos más. El siguiente paso es colocar esta masa en un molde metálico cuadrado o rectangular para emplatar y reservamos en el frigorífico para que tome más consistencia.
Mientras, colocamos las costillas veganas y la salsa con la que viene acompañada, en una bolsa de vacío, y le hacemos el vacío (si tienes posibilidad, si no, sigue la receta igualmente), la introducimos en un cazo con agua a una temperatura de 60 ºC durante media hora para que se cocinen a baja temperatura (para eso, deja el fuego bajo – medio y que nunca llegue a hervir). Pasado el tiempo, retiramos del fuego y reservamos en el cazo para mantener la temperatura.
Por último, antes emplatar, sacamos del frigorífico el puré con kale, desmoldamos con mucho cuidado y cortamos lingotes (si te es más fácil, puedes introducirlo mejor en el congelador para que sea luego, más fácil cortar los lingotes). En una sartén añadimos un poco de AOVE y vamos marcando cada lado del lingote con mucho cuidado para que no se deforme, hasta que quede dorado por todas las caras.
Los pasamos al plato para emplatar, añadiéndole por la parte de arriba las almendras picadas a tamaño mediano, para encontrar una textura crujiente. Entonces, sacamos las costillas, y en cada lingote colocamos dos unidades encima y salseamos por encima.